miércoles, 26 de agosto de 2009

Por la felicidad de las pequeñas cosas


Siempre me han encantado las pequeñas cosas de la vida, esas que aunque puedan parecer minúsculas dentro de ellas encontramos una gran felicidad.

Y ya no hablemos de lo feliz que me hace, que me recuerden alguna de esas cosas.

Ahora solo queda tomarnos los dos cafes con mucha azucar o dos frapuccinos, el tuyo de caramelo y el mio de chocolate, pero recuerda sin nata.

1 comentario:

. dijo...

Las pequeñas cosas de la vida son las que a veces te dejan una sonrisa de idiota en la cara. Será por eso que la mia es permanente.
Besos